LA MARAVILLOSA VARSOVIA

¡Hola! Me llamo Natalia y vivo en Varsovia, aunque últimamente me paso la vida viajando. Si le interesa, puede seguir mis aventuras en mi perfil de Instagram, (@nataliakusiak). ¡Pero no siempre ha sido así! Durante unos años trabajé como responsable de comunicación para una productora de cine y también inicié un colectivo femenino de DJ, que terminó pinchando en los mejores clubes de Polonia. Pero un día lo dejé todo y me fui a Asia... En todo este tiempo, he viajado por todo el mundo, pero Varsovia ocupa un lugar especial en mi corazón. Cuanto más tiempo paso en esta ciudad, más la aprecio: tiene el tamaño perfecto, un centro muy animado y rodeado de barrios igualmente interesantes. A eso se suma una escena gastronómica de alto nivel, mucho verde y un ambiente muy dinámico y ecléctico. A continuación, repaso algunos de mis lugares favoritos, que seguramente no aparecen en las típicas guías turísticas.

Trato de llevar una dieta vegana y, quizá lo que voy a decir pueda resultar sorprendente, pero lo cierto es que Varsovia ocupa año tras año un lugar destacado en la lista de las ciudades “más veganas” del mundo. Por lo general, prefiero ir a comer a lugares que no están en las zonas más transitadas, pero con “Bekef”, que está en pleno centro, hago una excepción. Este restaurante israelí, que tiene una dilatada trayectoria, ofrece platos veganos y vegetarianos, pero también opciones con carne. Sin duda, la estrella de la carta es el humus. Nunca he comido uno mejor, ¡ni siquiera en Tel Aviv!

Me encantan las tiendas de segunda mano, pero a nadie le gusta pasarse horas rebuscando los mejores modelos entre montones de ropa sin clasificar. ¡Por suerte, en el barrio de Mokotów hay una que solo ofrece lo mejor! Cuando entras es como si estuvieras en una boutique exclusiva. Por supuesto, esto no es casualidad: es fruto del trabajo de su propietaria, Justyna Konczewska, quien gracias a su extraordinaria selección ha creado una meca para todos los amantes de la moda. Aquí se pueden encontrar desde prendas de marcas famosas o diseñadores polacos hasta modelos sin una etiqueta reconocible, pero con un estilo clásico y una calidad excepcional. En “Crush” hay ropa que llega directamente del armario de los estilistas más reconocidos. Así que se puede descubrir muchas firmas pequeñas que son populares entre los expertos en moda. No obstante, los precios suelen ser asequibles y muchos productos también están disponibles en línea en el perfil de Instagram de la tienda.

La competición entre las mejores cafeterías de Varsovia está su punto más álgido. Tengo unas cuantas favoritas y, sin duda, “Stor” es una de ellas. Aquí cuidan hasta el más mínimo detalle. Se puede tomar café preparado de las más diversas maneras y comer deliciosos pasteles, a menudo también en versiones veganas. Los dueños se preocupan mucho por el aspecto ecológico, así que solo ofrecen vasos para llevar a cambio de un depósito, envuelven los bocadillos en servilletas de tela que se pueden llevar a casa y evitan el plástico siempre que pueden. Otro punto a favor es su ubicación en la calle Tamka, justo en frente del Motel One Varsovia.

Aprovechando que estamos en Tamka Street, también merece la pena visitar la exclusiva perfumería “Mood Scent Bar”. En este pequeño, pero maravilloso, establecimiento se pueden descubrir aromas únicos de todo el mundo. Tenga cuidado, porque, aunque uno puede creer que se trata de una tienda pequeña, es muy fácil perder la noción del tiempo y pasarse horas probando los diferentes perfumes. Si no está muy familiarizado con el mundo de las fragancias, el personal estará encantado de ayudarle. ¡Son unos verdaderos expertos!

Me gusta mantenerme activa, por eso disfruto tanto descubriendo y recorriendo calles y parques desconocidos hasta quedarme sin aliento, sobre todo cuando ya tengo unos cuantos kilómetros recorridos en el día. Sin embargo, en mis viajes a veces echo de menos un estudio de yoga local fiable donde poder relajarme. Si no quiere renunciar a su práctica habitual durante su estancia en Varsovia, le recomiendo “Yoga Beat”, un estudio situado en la calle Kielecka, en el barrio de Mokotów. Para mí, el estudio de yoga más hermoso de toda Varsovia. También dan clases de pilates y barra, además de ofrecer continuamente nuevas disciplinas, por lo que siempre hay algo nuevo que descubrir.

Recientemente me mudé al barrio de Ochota Vieja, una zona verde y tranquila, donde la vida pasa un poco más lenta. Anímese a dar un paseo por aquí para admirar edificios hermosos y respirar una atmósfera ligeramente distinta. Mi último descubrimiento en el área es el restaurante “Ocho”, situado en el teatro Ochota. Se trata de un punto de encuentro muy animado por las tardes, ideal para quedar a tomarse una copa de vino en las noches de verano. A la hora de la comida, también puede disfrutar de un delicioso menú internacional y de temporada que siempre incluye una opción vegana. Una prueba de que vale la pena visitarlo es que se lo he recomendado a unos cuantos amigos y ahora todos son clientes habituales.

Si le apetece descubrir pequeñas marcas polacas que ofrecen productos únicos, entonces puede comenzar por “Ministerstwo Dobrego Mydła” (que significa “Ministerio del buen jabón”). Como su nombre indica, esta marca de cosmética natural fundada por dos hermanas empezó únicamente con jabón, pero ahora tiene una oferta mucho más amplia. Todos los productos están elaborados con ingredientes naturales y huelen de maravilla. En mi opinión, es un lugar estupendo para comprar regalos originales y de alta calidad para cualquier ocasión.

Varsovia no es demasiado conocida por sus jardines botánicos, ¡pero debería! El Jardín Botánico de Powsin está un poco alejado de la ciudad, pero se puede llegar fácilmente en transporte público (que es realmente fiable en Varsovia) o en taxi. Es el lugar perfecto para refugiarse de las altas temperaturas que suele haber en verano. Además, los hermosos jardines son un escenario ideal para una sesión de fotos. Se lo recomiendo a cualquiera que tenga ganas de evadirse del ajetreo urbano.

Visitar mercadillos es uno de mis pasatiempos favoritos. He estado en muchos y tengo que admitir que el “Bazar na Kole” de Varsovia no tiene nada que envidiar a los mayores mercadillos del mundo. Se celebra todos los domingos en Wola. Lo mejor es llegar temprano, entre las 8:30 y las 9:00. A esa hora ya se han instalado todos los puestos, pero aún no hay demasiada gente. Aquí se venden de verdad artículos viejos y usados, y todo lo que tenga una historia que contar, desde muebles, piezas de decoración, lámparas, porcelana o vidrio hasta joyas y relojes. Importante: saque dinero antes de ir, porque solo se puede pagar en efectivo.